Nuevas adquisiciones: Marc Jacobs Lolita y Twinkle pop Volver
La potiteca ha recibido nuevas visitas en los últimos meses: una de ellas fue un regalazo de mi madre (esto de ser una hija en el exilio también tiene sus ventajas) y una compra-chollazo en los precios locos de Sephora, ambas de la recién lanzada línea de maquillaje de Marc Jacobs.
Como suele ser habitual en las casas de alta costura que se reinventan para diversificar su sector, el packaging suele ser un elemento muy cuidado, un punto fuerte basado en un diseño elegante que hace que según sujetas el producto en tus manos te des cuenta de que tienes en ellas un pequeño tesoro.
Este elemento está presente en mi primera nueva adquisición: la paleta The Lolita, perteneciente a la nueva gama de paletas llamada Style Eye-Con. Estas paletas constan siete sombras y están disponibles en nueve modelos, predominando en la mayoría de ellas los colores neutros. A mí personalmente, las que más me llamaban la atención eran la Parisienne, la Starlet y la que me regaló mi madre.
El caso es que mi señora progenitora, que por algo me conoce mejor que nadie, sabe que me chiflan las sombras marrones y sin decirle nada previamente, me compró la última que os he mencionado.
Superado el desmayo inicial abrí la caja y me encontré con esta bonitura:
El punto fuerte de la paleta es que las sombras tienen distintos acabados y muy buena pigmentación así que puedes combinarlas a la perfección. Tengo que reconocer que me parece una paleta realmente recomendable. ¿Imprescindible? Por supuesto que no. (Y más si tienes mil sombras marrones, ejemejem) Pero oye, si te apetece darte un capricho y aprovechas algún descuento de Sephora, es para planteárselo. Además, fue un regalo ¡A nadie le amarga un dulce!
Lo que sí fue una compra, y estoy bastante satisfecha con ella, fue la sombra en stick Twinkle Pop en el tono Volver. Había visto varios swatches y como se me había acabado mi adorado paintpot Bare Study me apetecía comprarme una sombra para sustituirlo.
Había echado un ojo a las Color Chameleon de Charlotte Tilbury (de las que ya os hablaré más adelante), a los Shadow Stick de Bobbi Brown hasta que llegaron los precios locos de Sephora y me encontré este tono perdido en un bote.
El tono Volver es un tono champán irisado que tiene un efecto bastante curioso: ¡Se siente superfresquito en el ojo! Había leído mucho sobre este efecto pero una, que es de las que se creen la mitad de la mitad de todos los milagros que se cuentan sobre los productos, estaba bastante escéptica al respecto. ¡Pues no, incrédulas del mundo! ¡Está fresquito de verdad! Últimamente estoy vaga por las mañanas y prefiero tirar de sombras en crema que me faciliten el trabajo.
Para esa función esta sombra es perfecta: aporta mucha luz y quita esa cara de recién levantada de un plumazo. Respecto a los pliegues, yo no suelo tener mucho problema con ellos porque siempre aplico una prebase antes. No he notado que este producto dé problemas, se fija adecuadamente al ojo, no pierde el glitter/irisado con facilidad y dura mucho intacto. Veredicto: Recomendable.
Para esa función esta sombra es perfecta: aporta mucha luz y quita esa cara de recién levantada de un plumazo. Respecto a los pliegues, yo no suelo tener mucho problema con ellos porque siempre aplico una prebase antes. No he notado que este producto dé problemas, se fija adecuadamente al ojo, no pierde el glitter/irisado con facilidad y dura mucho intacto. Veredicto: Recomendable.
¿A vosotras también os tiran los tonos neutros/marrones? ¡Os gustan las sombras en stick? ¿Habéis toquiteado ya los productos de Marc Jacobs?
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